martes, 16 de junio de 2009

Un cuento maravilloso...


Sigo en Laos, descubriendo , investigando, caminando, y bicicleteando por las calles de Vientain, su capital, con la nueva visa para 3 meses a Thailand en la mano.
Tenia muchas cosas nuevas que queria escribir y muchas fotos... pero me enviaron este cuento con mucho carinio, y lo vi mas bonito que cualquier cosa de viajes que fuera a contar yo... El cuento mas bonito del mundo , que estuvo guardado en un cajón 4 años...
Hoy voy volando, no camino, con lágrimas de alegría en los ojos, y unos nuevos zapatos en mis pies, para seguir caminando por muchos mundos...


Ahí va el cuento...sientate en mi nuevo salón, y disfruta...

Yo tenia un par de zapatos, q no eran rojos ni de charol, pero me acompañaban a todos sitios. Viajé mucho encima de ellos y descansábamos mutuamente el uno del otro por las noches, aunq reconozco q alguna no nos separamos y no por amor, ( por aquel entonces pensaba q eran un par de simples zapatos) , mas bien porque con la borrachera me olvide y ellos del cansancio q tenían no tenían ni fuerzas para apretarme mas los pies y dormíamos...
A la vuelta de uno de esos viajes, la muerte le enseñaba la patita a una amiga y yo encendía muchas velas, y la cera a veces manchaba los zapatos, y ellos ni se quejaban. Pasé momentos concentrado en la divinidad de la vida, pensando en como se escapa de las manos.Y mis ánimos se desinflaron y cayeron a mis pies y por consecuencia a mis zapatos.
Fue ahí dónde observando desde fuera mi estado de ánimo supe q mis zapatos eran mas q unos zapatos. Me sentí libre, sin miedos, sonriente y confiante en la vida, vi esa parte negra q me acosaba en la mente, esa preocupación de lejos era pequeña, con lo grande q parecía en mi mente...

En mis zapatos estuvieron mis ánimos recreándose toda la noche, y ésta vez si fue por amor.
Al despertarme la primera imagen q vi al mirarme los pies, fueron dos alubias gigantes de color azul pardusco, me froté los ojos y la segunda vez vi mis pies desnudos. Ni rastro de los zapatos.
Volvió a mi cabeza la rocambolesca historia de mi amiga, era una historia compleja, ella con partes del "todo" jodidas, con engranajes, tubos, sangre y tornillos, hasta alambres! algo q yo no comprendía, ni manejaba... era un mar de dudas. Pero algo tenía claro, y es q las velas se habían consumido y mis zapatos habían desaparecido!No le di mucha importancia porque ya teníamos confianza para movernos libremente, no sentíamos ataduras, era un vinculo sano.

No mucho mas tarde llegué a un puerto de ese mar de dudas, allí estaba mi amiga recuperandose de un doble transplante de pulmón. Bueno bueno, con alegría loca volví a casa a encender mas velas y encontrarme con los zapatos. Pero eso no ocurrió, bueno lo primero si, encendí las velas y esta vez la gota de cera me cayó en el pie y me quemó, pero me pareció un dolor razonable. Lo segundo no ocurrió. No ocurrió en mucho tiempo....
En ese tiempo mi amiga totalmente recuperada y en la misma ciudad q yo, me dio el primer abrazo de su nueva vida y hasta le había cambiado la voz!! Se reía tan cerca de mi q al oler su aliento me vino inmediatamente a la cabeza la imagen de mis zapatos!
Viví el reencuentro un tanto insólito , que me llenó el corazón de su energía. Me colapse un poco los primeros segundos pero entendí finalmente en qué se habían convertido mis zapatos, y por eso ese flash de mis pies como alubias gigantes...eran pulmones!!!
A continuación sentí un pinchazo en el pecho y mi amiga me comentó q todavía tenia un alambrito resto de la ingeniería quirúrjica que pinchaba... Para mis adentros pensé, q coño, eso son los cordones!!!

PD:algunas noches imagino a mis zapatos volando y metamorfoseándose en los órganos hasta llegar a la caja torácica de mi amiga. y así me quedo dormido...

5 comentarios:

merita dijo...

Alaaa¡¡ que bonito cuento.. pero lo más bonito es q atraigas a gente tan especial q sepa imaginarlos.. un beso gordo

FaNTaSMaS PoeTaS dijo...

Nena que alegría me ha dado saber de ti! Se me ha escapado una lagrimita, lo reconozco :P Últimamente estoy mas sensible de lo normal...

Me encantaría mandarte algo! Pero no paras no? Joooo que puedo hacerte que te guste y sea factible??? Un dibujito para colgarlo en el blog? Ainssss verás como sí que descubres algo en Laos, y es verdad lo que dices (que siempre lo dices) que todo ocurre por alguna razón...

Te echo de menos mucho, aunque se de ti cada vez que te leo, pero no te puedo estrujar... y es una sensación como si una ola te trajera a la orilla y de repente te llevara mar adentro.

Pero esa sonrisa que tienes en las fotos vale mas que cualquier pucherito de mi cara.

Te quiero mariposilla mía!

Anónimo dijo...

¡precioso!
desde luego que relato tan real e intenso......como lo sabe, cuidate mucho esos zapatos tan espeiales y sigue volando ¡¡valiente!!
te queremos. mc

aaa dijo...

Precioso el poema, la verdad que pone la piel de gallina. Que vaya bien por Laos, seguro que además de la lección aprendida, descubres cosas interesantes. Un saludo.

TNB

an?nimo dijo...

¡¡¡Increíble historia!!!.
¡¡¡Cuánto nos enseñan los demás a valorar los detalles de la vida, por pequeños que parezcan!!!.
¡Gracias a esta persona por compartir con nosotros "su cuento", "su vivenvia"!.
¡Y gracias a tí por lo que inspiras en los demás!.