(foto X Víctor)
Casas de piedra con olor a chimenea, huertos frente al porche, gatos en las ventanas, flores en los balcones de madera, un frontón sin puertas en mitad de un pueblo pequeño,verde reverde, lluvia caminando, el sonido de las gotas sobre mi chubasquero(me encantó), olores, colores de verano y otoño, ramas y hojas preciosas, flores en el camino, cientos de fotos con la mente (esta de arriba la hizo un amigo), poesía visual en forma de piedritas apiladas con maneras imposibles, troncos-sillones para hacer magníficos altos en el camino como este, sonrisas que pasan caminando, palabras de aliento que ponen las pilas,una chimenea encendida al final de la etapa,una ducha caliente que sabe a gloria, buena compañía para cenar ...
Escuchar cencerros cerca, caminar junto a una pastora con sus vacas y terneritos, escuchar el sonido de mi respiración, sentir fuerte mi corazón bombeando oxigeno en cada cuesta, sonreir al mirar atrás y ver que he llegado a la cima de la montaña,el sonido del viento en los arboles,la brisa que resfresca el esfuerzo,una fuente de agua limpia cuando estás sedienta...
Y cientos de mariposas, naranjas, blancas, lilas, amarillas, negras... se van cruzando en mi camino , desde el primer paso que dí.Me las tomo siempre como una buena señal.
Con la sonrisa puesta y todo esto, sé que voy por buen camino.
Casas de piedra con olor a chimenea, huertos frente al porche, gatos en las ventanas, flores en los balcones de madera, un frontón sin puertas en mitad de un pueblo pequeño,verde reverde, lluvia caminando, el sonido de las gotas sobre mi chubasquero(me encantó), olores, colores de verano y otoño, ramas y hojas preciosas, flores en el camino, cientos de fotos con la mente (esta de arriba la hizo un amigo), poesía visual en forma de piedritas apiladas con maneras imposibles, troncos-sillones para hacer magníficos altos en el camino como este, sonrisas que pasan caminando, palabras de aliento que ponen las pilas,una chimenea encendida al final de la etapa,una ducha caliente que sabe a gloria, buena compañía para cenar ...
Escuchar cencerros cerca, caminar junto a una pastora con sus vacas y terneritos, escuchar el sonido de mi respiración, sentir fuerte mi corazón bombeando oxigeno en cada cuesta, sonreir al mirar atrás y ver que he llegado a la cima de la montaña,el sonido del viento en los arboles,la brisa que resfresca el esfuerzo,una fuente de agua limpia cuando estás sedienta...
Y cientos de mariposas, naranjas, blancas, lilas, amarillas, negras... se van cruzando en mi camino , desde el primer paso que dí.Me las tomo siempre como una buena señal.
Con la sonrisa puesta y todo esto, sé que voy por buen camino.
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